top of page
Alex Onea

Ford retrasa la producción de vehículos eléctricos para centrarse en las camionetas Super Duty de alta demanda

En el dinámico mundo de la industria automotriz, Ford Motor Company está llamando la atención con su último cambio estratégico. A medida que el mercado de vehículos eléctricos (EV) sigue creciendo, Ford ha tomado una decisión sorprendente pero inteligente que podría impactar significativamente su rentabilidad. En lugar de avanzar agresivamente con la producción de EVs, la empresa está dando un paso atrás para centrarse en lo que mejor sabe hacer: fabricar camiones muy rentables. Esta decisión, influenciada por el análisis de expertos y el clima del mercado actual, demuestra la capacidad de Ford para adaptarse y priorizar sus fortalezas.

4o mini

Recientemente, analistas como John Murphy de Bank of America han sugerido que los fabricantes de automóviles de Detroit, incluyendo Ford, deberían cambiar sus estrategias. Con recomendaciones para centrarse en camiones muy rentables y reducir su presencia en China, Murphy incluso sugirió que los fabricantes de automóviles deberían retrasar sus proyectos de vehículos eléctricos hasta que puedan alcanzar una rentabilidad similar a la del líder del sector, Tesla. Aunque detener completamente la producción de EVs no es viable para Ford, la compañía está haciendo ajustes importantes para reducir sus pérdidas en EVs, que se proyecta que alcanzarán los 5.5 mil millones de dólares en 2024.


La nueva estrategia de Ford se centra en aumentar la producción de sus camionetas Super Duty, que son muy rentables, en su planta de Oakville, Ontario. Esto representa un cambio importante con respecto al plan original, que era convertir la planta en una instalación para fabricar dos modelos de SUV eléctricos de tres filas para 2025. En su lugar, debido a la fuerte demanda y mejores beneficios de las camionetas Super Duty, Ford ha pospuesto la producción de los SUV hasta 2027. Esta decisión resalta el compromiso de Ford de ajustar su enfoque de producción para aumentar la rentabilidad y satisfacer mejor las necesidades del mercado.


La razón detrás del cambio estratégico de Ford es clara: satisfacer la alta demanda de las camionetas Super Duty y retrasar la producción de los vehículos eléctricos menos rentables. Solo en el primer trimestre, la unidad de negocios de EVs de Ford, Model e, enfrentó una pérdida de $1.3 mil millones. Por otro lado, Ford Pro, que incluye las populares camionetas Super Duty, generó $3 mil millones, con un margen EBIT del 16.7%. Este margen es mucho más alto que el de Ford Blue, la división de vehículos a gasolina de la empresa, que tuvo un margen EBIT del 4.2%. Al centrarse en las camionetas Super Duty más rentables, Ford espera mejorar su rendimiento financiero y manejar cuidadosamente su entrada en el mercado de vehículos eléctricos.


Mirando hacia el futuro, el destino de la industria automotriz claramente involucra vehículos eléctricos, pero el crecimiento rápido esperado probablemente será más lento de lo inicialmente predicho. Ford está ajustando su estrategia para enfrentar este desafío al desviar su enfoque de los EVs hasta que pueda hacerlos más rentables. Como parte de este plan, la empresa ya ha retrasado varios proyectos de EV para reducir el gasto en $12 mil millones. Los inversionistas deben estar atentos al progreso de Ford durante los próximos 18 meses, especialmente en cuanto a mejoras en la eficiencia de producción de EVs y reducción de costos. Este cambio estratégico está diseñado para posicionar a Ford de manera más favorable mientras navega por el mercado en transformación.


En resumen, la decisión de Ford de retrasar la producción de vehículos eléctricos a favor de aumentar la producción de camionetas Super Duty refleja un cambio estratégico diseñado para mejorar la rentabilidad y satisfacer la demanda del mercado. Al centrarse en sus fortalezas y en los camiones rentables mientras retrasa los proyectos de EV menos rentables, Ford se está posicionando para manejar mejor el cambiante mercado automotriz. Los inversionistas deben observar cómo estos cambios afectarán la salud financiera y el crecimiento futuro de Ford en los próximos meses.


bottom of page